Fabriciano, como era conocido en el ámbito artístico y por toda la sociedad chaqueña, nació en la capital chaqueña el 27 de junio de 1944.

Además de ser el impulsor y alma máter de la mundialmente famosa Bienal de Esculturas, tuvo un rico legado de obras propias.

En 1968 egresó de la Academia de Bellas Artes de la provincia de Chaco como Maestro de Artes Visuales, Profesor de Dibujo, Pintura y Escultura, donde luego se desempeñó como profesor de Escultura.

Vivió en Carrara (Italia) y en París (Francia) hasta 1982, año a partir del cual regresó a la Argentina estableciéndose de manera definitiva.

Fue miembro de la Academia Nacional de Bellas Artes y su representante en la provincia del Chaco. En noviembre de 1989, luego del primer concurso de Esculturas en Resistencia, creó la Fundación Urunday, desde donde organizó la Bienal de las Esculturas.

Participó en importantes exposiciones colectivas e individuales en distintos lugares del país y el extranjero, en donde fue premiado, tanto en el Salón Nacional (1977), como en Italia (1986,1987 y 1992), Canadá (1989), Francia (1992), Japón (1998), Noruega (1994), entre una larga lista de reconocimientos.

Tras sufrir una afección cardíaca y ser sometido a una cirugía, murió el 8 de septiembre de 2021 a los setenta y siete años en su ciudad natal, cuyo nombre hizo famoso en todo el planeta.