«Argentina el país sudamericano que más implantes cocleares realizó», aseguró el Dr. Rafael Knopoff
médico otorrino Rafael Knopoff
El médico chaqueño es pionero en la región y en Argentina, explicó a INFOQOM que «para hacer el implante hay varias partes que se necesitan: primero un cirujano otológico capacitado para hacer un implante, audiólogas para estudiar al paciente para hacer un implante, después se precisa el equipamiento para el mismo, hay tres empresas que nos abastecen una empresa australiana, una norteamericana y otra austriaca».
Para estas intervenciones cuentan con el cirujano Torosqui, dos ayudantes, un instrumentista formada para implantes, una anestesista también formado en implantes y la audióloga.
Aquí cada empresa proveedora de los implantes, tienen diferentes servicios, explica Knopoff «algunas empresas mandan la audióloga para el estudio intraquirúrgico que consiste en que cuando nosotros implantamos al paciente y le colocamos el electrodo, hacemos un cierre virtual y colocamos un imán conectado al implante y eso va conectado a la computadora y la audióloga verifica si el implante está bien colocado, verifica cuantos electrodos están adentro si hay alguno afuera, verifica la calidad de la audición y lo que se llama evaluación de respuesta evocada, si el implante una vez estimulado manda señales al cerebro entonces estamos seguros que las cosas andan bien y se cierra».
La certificación y evaluación de cada implante es extremadamente exigente
«Cada empresa que nos manda el implante, lo mandan ya evaluado, probado de que funciona. Puede fallar o puede de que se detecte algún problema, por eso viene con un back up. Nosotros tenemos que estar muy seguros porque sino, la empresa no se hace cargo. Todos los datos que se cargan a la computadora. Mientras vamos colocando el implante, se lo llevan las empresas que nos mandan el implante. Si el Estado o alguna prepaga solicita información del paciente, la empresa se lo tiene que dar».
Más 140 implantes y 12 años de experiencia con capacitación permanente
«Nosotros estamos implantando hace 12 años, tenemos 140 implantes. Desde el primero que nosotros hicimos hasta ahora, ha variado muchísimo, por eso, las empresas cada 6 meses nos dan cursos de capacitación con las nuevas tecnologías que tienen, porque están permanentemente incorporando procesadores de habla externa que lleva el implante que antes eran de 10 a 15 centímetros y ahora tiene no menos de 5 centímetros. El procesador interno que colocábamos antes tenía 1 cm de espesor ahora tiene medio centímetro, es algo que no se nota casi nada, va debajo de la piel. Los electrodos que van dentro del implante son entre 20/24 electrodos. Cada vez tienen más conexión entre ellos, lo que influye notablemente en la calidad de la audición».
Implantes para percibir la música y con bluetooth
«Antes el implantado no percibía la música, ahora empiezan a percibir y diferenciar un tono de otro. Los nuevos procesadores externos donde tiene el micrófono que recibe la audición y lo transmite a través de un imán al procesador interno y el procesador interno de ahí al cerebro, ahora están viniendo con conectividad, es decir el paciente tiene en su teléfono la aplicación y puede regular el implante, puede en caso de tener algún inconveniente comunicarse con su audióloga y poder modificar su implante. Y los últimos ya vienen con bluetooth, para que la audición entre directamente del equipo de audio al implante sin distorsión del medio ambiente con una claridad de audición fantástica todo esto gracias a los avances tecnológicos».
El protocolo de envío de implantes es muy exigente
No solamente en el seguimiento del envío y en el packaging, sino que llegan 2 implantes, por si uno falla, los médicos ya tienen un segundo producto. En caso de no existir inconvenientes en el funcionamiento del implante coclear, el segundo producto es devuelto a la fábrica.










