Inminente privatización y extranjerización del Banco Nación

Por Juan Manuel Pedrini, diputado nacionalMediante Decreto 116/25 el presidente Javier Milei, transformó el Banco de la Nación Argentina, de un Ente Autárquico Estatal, a una Sociedad Anónima que se regirá por la Ley de Sociedades. Se fijó un capital de Un billón seiscientos dos mil millones ($ 1.602.000.000), cada acción ordinaria tendrá un valor de $ 1.000 que otorga derechos a 5 votos.

El BNA, es superavitario, es el Banco con mayor número de clientes de Argentina, el que concentra la mayoría de los depósitos y más prestamos otorga, para reactivar el consumo y/o financiar actividades económicas estratégicas. Emplea a mas de 15.000 trabajadores y sus sucursales (más de 700) cubren la geografía nacional.

Consecuencias:

Las acciones serán vendidas en el mercado nacional e internacional, consumándose de ese modo, la enajenación del principal activo financiero de la República Argentina. Los inversores extranjeros cobrarán dividendos, que serán llevados al exterior, consumándose otra fuente de egresos del patrimonio de los argentinos y descapitalización nacional.

El Banco Nación, al convertirse en SA queda fuera del sistema de control del Estado, y se relaja el contralor del mismo.

Hasta ahora es controlado por el Banco Central, la Auditoria General de la Nación y la Sindicatura Nacional. Este intento de privatización es absolutamente ilegal, ya que el BNA, junto a YPF y Aerolíneas Argentinas, fue expresamente excluido de las empresas a privatizar aprobadas en la Ley 27742 de Bases y punto de partida para la Libertad de los Argentinos.

Además existe un fallo del Juez Ramos Padilla, que ante una presentación judicial de la Asociación Bancaria, sentencio, que al ser el Banco Nación, un ente autárquico creado por Ley, cualquier intento de privatización o modificación de su estructura jurídica, debe ser necesariamente aprobado por el Congreso de la Nación Argentina.