Desecharon residuos asfálticos en una laguna del barrio Parque Autódromo.
La laguna actúa como canal de drenaje cuando llueve. "Si contaminan ese espejo de agua, todo va a parar al río Negro", alertaron.
Vecinos temen por su salud
Vecinos denuncian el vuelco de sustancias derivadas del petróleo en una laguna clave para el drenaje del barrio. Además, enfrentan basurales y nulo mantenimiento municipal.
Vecinos del barrio Parque Autódromo de Resistencia manifestaron su profunda preocupación por el vuelco de residuos tóxicos en una laguna que funciona como desagüe natural del vecindario.
Según relataron, un camión particular descargó desechos asfálticos «posiblemente alquitrán mezclado con solventes» en el borde del espejo de agua, a metros del histórico pero abandonado Autódromo Santiago «Yaco» Guarnieri.
«Ese lugar es donde muchos chicos humildes del barrio se bañan en verano. No puede ser que lo usen como vertedero de residuos peligrosos», relató un vecino que vive allí desde hace 26 años.
LAGUNA CONVERTIDA EN VERTEDERO
Los materiales que se desechan son restos utilizados para trabajos de asfaltado. Según explicaron, el olor fuerte y penetrante evidencia la presencia de alquitrán y otros solventes derivados del combustible. «No sabemos de dónde viene ese camión, pero lo que tira es tóxico. El alquitrán no se degrada fácilmente, contamina el agua y puede afectar nuestra salud», advirtieron.

El problema ambiental también es sanitario: esa laguna actúa como canal de drenaje natural cuando llueve. «Si contaminan ese espejo de agua, todo va a parar al río Negro», alertaron.
UN BARRIO OLVIDADO
La situación crítica del Parque Autódromo recuerda a Villa Don Enrique, ya que no se limita a este episodio de contaminación. «El barrio está abandonado. La recolección de basura no existe y el acceso está intransitable», señalaron.

También aseguraron que el autódromo, ícono del lugar, fue completamente saqueado: «Se llevaron todo. Luces, cables, hasta los sanitarios. No quedó nada».
Aunque no realizaron denuncias formales, los vecinos optaron por visibilizar el conflicto a través de los medios. «No sirve denunciar. La única forma de que alguien se interese es hacerlo público. Si no, lo archivan en un escritorio», expresaron.






